En un encuentro trabado, con dos goles anulados -uno por equipo- y con una definición agónica en la cabeza de Virgil Van Dijk, el Liverpool se coronó campeón de la Carabao Cup ante Chelsea. Así, Alexis Mac Allister pudo alzar su primer título con la camiseta de los Reds, mientras que Enzo Fernández se quedó con las ganas en los Blues.