Desde hoy, los usuarios del transporte interurbano de la provincia deberán enfrentar un nuevo ajuste en el costo de los pasajes. El incremento, del 6%, ya había sido anunciado y forma parte de la actualización tarifaria prevista para noviembre. Este aumento eleva el precio del pasaje a la capital, Córdoba, a aproximadamente $18.800 por tramo, mientras que los destinos como Villa María y San Francisco alcanzarán los $10.500.

El ajuste se enmarca en una serie de subas programadas por el sector de transporte, que viene implementando un esquema gradual para enfrentar los costos operativos y el contexto inflacionario. Si bien este aumento era esperado, su impacto no deja de preocupar a los pasajeros, quienes deberán reorganizar sus presupuestos para continuar usando el servicio.

No obstante, los usuarios deben estar preparados para otro golpe al bolsillo: en diciembre se aplicará un nuevo incremento del 5,22%. Esto significará un cierre de año aún más oneroso para quienes dependen del transporte interurbano, reflejando una situación cada vez más complicada para el sistema de movilidad de la región.

Las reacciones al aumento no se hicieron esperar. Organizaciones de usuarios y defensores de consumidores han señalado que los incrementos consecutivos ponen en jaque a trabajadores y estudiantes que requieren del transporte para sus actividades cotidianas. Para muchos, la posibilidad de encontrar alternativas se reduce, lo que agrava el problema de accesibilidad económica.

Mientras tanto, las autoridades del sector justifican estas medidas como una necesidad para mantener la operatividad y responder al aumento de costos generales en combustibles y mantenimiento. El desafío, sin embargo, seguirá siendo encontrar un equilibrio entre la sostenibilidad de las empresas y la viabilidad de los servicios para la población.