Franco Colapinto protagonizó un muy duro incidente en el Gran Premio de Brasil, cuando en el ingreso a la recta principal sufrió de un grave caso de acuaplaneo que le hizo perder el control de su Williams FW46 y provocó la bandera roja en la vuelta 32 de la carrera.
El accidente despertó debate debido al diálogo que mantuvo con su ingeniero de pista Gaëtan Jego en los instantes previos, con el argentino clamando desesperadamente por un juego de neumáticos para lluvia extrema.
"Quedate afuera. Necesitamos sobrevivir, quédate afuera. Necesitamos sobrevivir, creemos que va a parar después de un minuto. Modo de supervivencia en este momento. Solo mantenete en pista, intenta mantener toda la temperatura que puedas. La mayoría de los autos están en intermedios", explicaba Jego a Colapinto luego de que saliera a pista el coche de seguridad por las condiciones de pista.
Por su parte y con la ventaja de estar dentro del monoplaza para poder observar de cerca como eran las condiciones, sumado al hecho de estar bajo un coche de seguridad, el oriundo de Pilar mocionó por un cambio a neumático de lluvia extrema, lo cual se hubiese brindado más agarre ante la situaciones de agua estancada en partes del circuito. "Ya lo sé, en dos vueltas gano el tiempo de vuelta, amigo".
Pese al intento de Colapinto, Jego mantuvo su postura y pidió al argentino que siguiera con el plan del equipo. "Confía en nosotros, amigo. Recorda lo que discutimos. Dejanos hacer nuestro trabajo, hace el tuyo. Confía en nosotros, creemos que es la decisión correcta".
Pese a la creencia del francés, el pilarense pocos vueltas más tarde tuvo que abandonar después de pegarse un golpazo en el giro 32, con el auto de seguridad en la pista y después de cambiar por segunda vez los neumáticos.
En la parte final del trazado, lo perdió al atravesar una área con mucha agua concentrada y se dio contra el paredón y siguió, con una fuerte rotura en el costado izquierdo. La bandera roja asomó enseguida y la carrera se detuvo unos minutos.
Por fortuna, resultó ileso y se lo pudo ver en la pista junto al accidentando coche, lamentando el impacto. "Estoy bien", alcanzó a decir el de Pilar por la radio. Acto seguido, se decidió la interrupción de la prueba hasta que mejorara el tiempo y la pista se desagotara un poco.
Ya en la rueda de prensa, Colapinto no escondió los efectos del impacto y se lamentó por el abrupto final a su participación.
"Fue un golpe muy fuerte, la verdad que el auto se destrozó. Estoy muy triste y le pido perdón al equipo que trabajó un montón para poner el auto en pista", lanzó con frustración.
En cuanto a la estrategia de carrera, Colapinto explicó la decisión de utilizar neumáticos intermedios para mantener la temperatura en una pista cada vez más resbaladiza. "Pusimos gomas intermedias otra vez, estaba muy mojada la pista, para mantener la goma en temperatura. Traté de empujar lo máximo que tenía, pero había un río tremendo en la recta y fui un pasajero. Fue un día malo, complicado", cerró y remarcó que la falta de estabilidad fue una constante para todos los pilotos.
