La expresidente Cristina Fernández de Kirchner posteó en sus redes sociales un análisis del programa económico de Javier Milei al que tituló: "Es la economía bimonetaria, estúpido". Allí expone lo que considera que son las contradicciones del Gobierno.
Pero la carta abierta de la exmandataria también analiza al movimiento peronista en la actualidad y sorprendió al marcar, desde una mirada autocrítica, cuestiones que abren el juego para repensar el rol del peronismo en el siglo XXI. "Hay que poder enderezar las experiencias y ordenar las nuevas demandas para poder alinear pensamiento, palabra y acción", expresó Cristina.
El documento publicado tiene ocho páginas. En ellas, Fernández de Kirchner apunta contra la gestión económica de Javier Milei y lo acusa de mentir en su campaña presidencial ya que, tal como sostiene, el libertario prometió eliminar la intervencióon del Estado en la economía y sin embargo controla de manera directa tres de los cuatro precios clave de la economía.
Se refirió también al denominado "cepo" como herramienta de control que fue estigmatizada como tal y que surgió en su gobierno debido a las corridas cambiarias que sufrió su gestión. Sobre esto, señaló que en los últimos años se sucedieron más corridas a pesar del color político del gobierno de turno, a tal punto que "dicha regulación (“cepo”) no pudo ser eliminada hasta el día de la fecha y continúa con el tope de 200 dólares".
"Y eso que pasaron macristas, peronistas y ahora hasta libertarios, todo bajo el estricto control del FMI", destacó la expresidenta.
Otros puntos de la carta de Cristina:
Crisis de representatividad sindical: para la ex mandataria, "las representaciones sindicales características del siglo XX y fundantes del peronismo ya no son la expresión mayoritaria de los trabajadores".
Deficiencias en el Estado: criticó lo que llamó el "viejo modelo de Estado omnipresente que derivó en ineficiencia e ineficacia", modelo que no supo adaptarse a los tiempos modernos, generando una burocracia que es observada por la sociedad con recelo.
Educación y seguridad como temas pendientes: criticó la falta de una "revisión y reforma profunda de la educación pública" e hizo hincapié en la necesidad de un plan integral que combata la "desigualdad social" y el "gatillo fácil", al mismo tiempo que aborde el creciente avance del narcotráfico.
